El día del orgullo gay 2017 fue muy especial en Madrid ser la capital mundial del orgullo. World Pride. Se trataba de la quinta celebración (pensé que serían más) y también pensé que eran anuales.
En mi opinión este tipo de eventos son cada vez más una fiesta (vale, un evento festivo) que una reivindicación ya que en todas las ciudades que se ha celebrado hay bastante «aperturismo sexual».
Pero como todo macroevento se busca un impacto económico, sino que alguien me explique que se haga en lugares que garantizan una gran oferta de ocio acompañada de una buena infraestructura de alojamiento y transportes, y no en una ciudad de provincia dónde tener una orientación sexual que no sea hetero es bastante más complicado.
Pero que diablos, si es una reivindicación y sabiendo el impacto mediático que tienen, deberían celebrar este evento mundial en alguno de los muchos lugares del mundo en los que están discriminados social y legalmente.
Este titular está vinculado a la noticia y podéis comprobar que es de 2017.
Pero por si nos habíamos olvidado, estamos en Españistán, lo de reivindicar lo llevamos en la sangre y lo de gastar dinero público en lo que nos apetece, también. No sé si es necesario concienciarnos o no, si se trajo el evento porque el ROI era positivo, o no. Pero la verdad es que este evento se realizó en Madrid, porque lo subvencionamos públicamente, de ahí que el mayor conflicto del World Pride 2017 es sobre quién ganó más dinero y si se recuperó la inversión.
Al final lo de siempre, la izquierda da unas cifras de visitantes y de gasto, la derecha da otras, eso si, para la foto se ponen todos:
Si es que somos muy progres todos. Bailan hasta los que recurrieron el matrimonio homosexual… Marca España, le llaman.
Y ya, para terminar, pongo el vídeo que quería poner, sobre el impacto del World Pride en el turismo internacional de Madrid 2017. Si el año 2018 bajan las cifras de turistas en la capital, no nos alarmemos que el 2017 fue coyuntural.
